China comunicó un aumento de sus reservas de oro por primera vez en más de tres años, lo que arroja algo de luz sobre la identidad de los compradores secretos en el mercado de metales preciosos.

El Banco Popular de China aumentó sus reservas en 32 toneladas en noviembre con respecto al mes anterior, según informó el miércoles en su página web. Esto elevó su total a 1.980 toneladas, la sexta reserva mundial de lingotes de oro en manos de un banco central.

En el sector del oro abundaron las especulaciones sobre los bancos centrales que estaban detrás de las casi 400 toneladas de compras soberanas del tercer trimestre. Sólo una cuarta parte de las compras se hicieron públicas en su momento, lo que llevó a los observadores del mercado a citar a China y Rusia como posibles culpables..

Para China, la necesidad de encontrar una alternativa a los dólares, que dominan sus reservas, es raramente aguda. Las tensiones con Estados Unidos han aumentado considerablemente desde que se tomaron medidas contra sus empresas de semiconductores, y la invasión rusa de Ucrania ha demostrado la voluntad de Washington de imponer sanciones a las reservas del banco central.

Las compras del NBK podrían formar parte de un plan para diversificar las reservas y alejarlas del dólar, según Giovanni Staunovo, analista de UBS Group AG. "Las reservas de oro de China como parte de las reservas totales siguen siendo muy pequeñas, por lo que probablemente haya margen para nuevas compras en el futuro", afirmó.

Anteriormente, China llevaba mucho tiempo sin revelar los cambios en sus reservas de oro. Cuando el banco central anunció un aumento del 57% de las reservas, hasta 53,3 millones de onzas, a mediados de 2015, fue la primera actualización en seis años. Desde finales de octubre de 2016, se tomó otro respiro antes de reanudar la notificación de compras en diciembre de 2018.

Aunque las compras de los bancos centrales rara vez desencadenan una subida sostenida del oro, pueden ser un respaldo importante cuando los precios caen. El metal precioso se ha visto presionado este año por el agresivo endurecimiento monetario de la Reserva Federal, aunque ha resistido relativamente bien las oscilaciones del dólar y de los rendimientos de los bonos del Tesoro.

"A medida que se acelera la desglobalización, se espera que los países no pertenecientes a los Diez Grandes aumenten sus tenencias de oro", afirmó Nicky Shils, responsable de estrategia de MKS PAMP SA.

El oro subió a 1.772,81 dólares la onza a las 10.41 horas en Londres. El lingote superó fugazmente los 1.800 dólares el viernes y ha caído alrededor de un 3% en lo que va de año. El índice del dólar al contado apenas varió. La plata subió, el platino bajó y el paladio se mantuvo estable.